Lanzarse al mar, olvidarse de las raíces en tierra y crear una familia en un velero, no es tarea fácil, pero algunos se atreven, y lo logran.
En Enero os comenté en otro post, la intención de dar la vuelta al mundo por parte de Carmen Dopico y Oriol Busquets que, con su hijo Leo, de sólo un año, saliendo de Port Balis el pasado mes de Abril.
Ahora cae en mis manos una experiencia muy consolidada, se trata de la familia Meder, en este caso, la decisión fue motivada tras perderlo todo en 2011, cuando el volcán Puyehue hizo irrespirable su hogar en Bariloche(Argentina).
En ese momento Rocío y Hernán, con 27 años y dos mellizos de apenas 6 meses, decidieron probar esa nueva vida y zarparon en él en 2017.
Hoy, tras 8 años, y una familia que creció, ya son cinco, su modo de vida sigue desarrollándose en su velero Kira Kira, un Van de Stadt 36 de acero.
Una vida llena de retos e inestabilidad, ya que Hernan debe generar algunos ingresos en los puertos donde llegan. Pero también vencer retos para sus hijos, como es la educación y las necesidades de socializar.
Pero, aun con los posibles problemas, lo familia marinera Meder, sigue valorando más esa libertad y aventura, por encima de la estabilidad de la vida en tierra.
Podéis seguirlos en Instagram @familiameder.
O saber un poco más de ellos en INFOBAE, por Florencia Illbele.