Una práctica poco usada, pero si atractiva cuando varios veleros, entre amigos, navegan a un mismo destino, es la de abarloarse cuando se fondea en una tranquila cala. Eso eliminará la necesidad de nadar hasta las otras embarcaciones, poder compartir momentos de forma inmediata, incluso música, si los gustos son afines.
Empiezan a existir algunos dispositivos de ayuda para abarloarse
Pero esta práctica no es ajena a posibles problemas, hay que tener en cuenta algunas probables incidencias, empezando por el uso del ancla o anclas, las cuales pueden enredarse al bornear, por lo cual se recomienda usar una sola, la de la embarcación de mayor tamaño, que la habrá preparado para asegurar el peso mayor derivado por las otras naves abarloadas. Pero también tener en cuenta la meteorología, que puede cambiar haciendo peligrosa esa cercanía entre los veleros y, debido a esa probabilidad, deberá asegurarse que la forma de unir a esos barcos, a través de amarras y con las consiguientes defensas entre ellos, deben ser fáciles de eliminar en caso de necesidad.
Navegar a vela 